No hay nada más sencillo y tradicional que una tortilla. De ahí que los veganos tampoco queramos abandonar una preparación tan buena. Desde Vegaffinity, con mucho amor y cariño, ¡post de cinco recetas de tortilla vegana!
Una vez que encuentras el punto exacto a la preparación del sustituto del huevo, podrás hacerlas de todos los tipos y tamaños que puedas imaginar. Nosotros te facilitamos cinco recetas distintas de tortilla, así que quédate y echa un vistazo a todas.
El huevo no es algo insustituible, aunque sea considerado el ingrediente básico para hacer una tortilla. Desde hace tiempo, el veganismo ideó la receta de su propia tortilla, despojándola de su ingrediente más importante: el huevo, que se sustituye fácilmente por harina de garbanzo, agua y, en algunos casos, añadiendo también un poco de vinagre de manzana.
Y es que la realidad es que la tortilla vegana mantiene prácticamente el mismo sabor que la tradicional. Prepárala y compruébalo.
TRUCO: Para que sepa más a huevo sin llevaro, puedes añadirle un poco de sal negra del Himalaya Kala Namak. ¡Sabe a huevo! Puedes comprar sal negra aquí.
Si quieres leer un completo artículo sobre sustitutos del huevo, puedes verlo aquí, y si deseas comprar sustitutos veganos del huevo puedes hacerlo en nuestra tienda online. ¡Comenzamos!
Tortilla vegana con pimientos y cebolla
Ingredientes
- 1 cucharadita de semillas de lino
- 8 cucharadas de harina de garbanzo
- 180 ml (11 o 12 cucharadas) de agua
- 1 cucharadita de cúrcuma molina
- Sal y pimienta al gusto
- 2 dientes de ajo
- ½ pimiento verde
- ¼ de cebolla
- Aceite de oliva
- Sal Kala Namak (opcional). Puedes comprarla aquí.
Elaboración
Primeramente, mezclamos las semillas de lino más 3 o 4 cucharadas de agua, y por otro lado, la harina de garbanzos más su proporción de agua (unas 8 cucharadas). En la batidora, tritura e integra todo hasta tener una textura homogénea. Salpimenta al gusto y vuelve a batir.
En un sartén con un chorro de aceite de oliva, dora las verduras troceadas por igual: ajo, cebolla y pimiento verde, en una especie de juliana fina. Añade la primera mezcla triturada y cocina a fuego medio durante unos 7 minutos por cada lado, que será lo que tarde en dorarse nuestra tortilla. Si extrañas el sabor a huevo cuajado, un toque de sal Kala Namak por encima de la tortilla dotará de ese sabor a la preparación.
El resultado:
Tortilla vegana de patatas
Ingredientes
- Aceite de oliva virgen extra
- 4/6 de patatas
- ½ o 1 cebolla
- 250 gramos de harina de garbanzo
- 16 cucharadas de agua 1 taza de agua
- Vinagre de manzana
- Sal marina
Elaboración
Para comenzar, las patatas. Las pelamos y lavamos, y las troceamos en láminas finas. Seguidamente, cortamos la cebolla en trocitos muy pequeños, o en una juliana muy fina.
En una sartén grande, añadimos abundante aceite. Una vez caliente, echamos las patatas, la cebolla, y ponemos sal al gusto. Dejamos que las patatas se cocinen a fuego medio hasta que estén hechas durante unos 15-20 minutos, removiendo cada cierto tiempo para que no se peguen a la sartén. Haciéndolas a fuego medio conseguiremos una textura confitada y suave. Una vez listo, eliminamos el exceso de aceite colocando la comida en una fuente con papel absorbente.
Tras esto, preparamos la mezcla para cuajar nuestra tortilla. En un bol, añadimos los 250 gramos de harina de garbanzo y de agua, por igual proporción. Batimos de forma constante hasta conseguir una mezcla homogénea, añadimos sal, y las patatas y cebolla cocinadas. Removemos e integramos bien todos los ingredientes.
En otra sartén grande (puedes reutilizar la misma para aprovechar el sabor que habrá dejado la preparación anterior), utilizamos un par de cucharadas de aceite. Una vez caliente la sartén, vertemos nuestra preparación y volvemos a cocinar a fuego medio durante 5 minutos. Le damos la vuelta, y freímos de nuevo otros cinco minutos por la otra cara. Cuando esté dorada, sacamos.
El resultado:
Tortilla vegana de brócoli
Ingredientes
- 1 ramillete de brócoli
- 1 pizca de pimienta
- 1 cucharadita de perejil
- 1 cucharada de agua
- 2 cucharadas de harina de garbanzo
- 1 pizca de sal
- 1 pizca de ajo en polvo
Elaboración
Cocemos el ramillete de brócoli con un poco de sal en agua hirviendo durante 4-5 minutos. Escurrimos bien y reservamos.
En un bol, mezclamos las dos cucharadas de harina de garbanzo con otras dos de agua y las especias, en nuestro caso, perejil, ajo en polvo y pimienta. Picamos el brócoli en trozos pequeños, y lo mezclamos con nuestra mezcla de huevo vegano.
Y ahora, a la sartén. Añadimos todo a una sartén mediana con un poco de aceite caliente, dejamos que se haga bien por la cara de abajo (que se forme una costra dura para que no se desmorone al dar la vuelta) y nos ayudamos de un plato para darle la vuelta para hacerla por la otra cara. Dora al gusto.
El resultado:
Tortilla vegana de champiñones al ajillo
Ingredientes
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de perejil
- 3 cucharadas de agua
- 3 champiñones
- 1 pizca de cúrcuma
- 3 cucharadas de harina de garbanzo
- 1 chile rojo/pimiento cayena
Elaboración
Primeramente, en un bol, ponemos tres cucharadas de agua, y añadimos otras tantas de harina de garbanzo, hasta que la mezcla sea espesa. Lo condimentamos con perejil y reservamos.
Por otro lado, laminamos el ajo y lo doramos levemente en aceite, y atentos a que no se queme. Añadimos también, si deseamos un toque picante, un trocito de chile rojo o pimienta cayena. Laminamos nuestros champiñones, y los añadimos también y volvemos a condimentar con perejil picado fresco.
Cuando esté listo, apartamos y dejamos reposar un minuto para después añadir esta preparación a la mezcla de harina y agua.
Por último, freímos todo por ambos lados con cuidado de que no se rompa. Si deseas un tono de color más oscuro y un pequeño matiz de sabor, añade cúrcuma.
El resultado:
Tortilla vegana de manzana
Ingredientes
- 1 manzanagolden grande, o dos medianas ecológicas
- Harina de garbanzo
- Leche de avena
- Levadura nutricional
- Sal marina
- Aceite de oliva virgen
Elaboración
Comenzamos pelando nuestra manzana, y tras esto, la cortamos en gajos finos.
Ponemos a saltear la manzana en un sartén con un poco de aceite y una pizca de sal. Mientras tanto, mezclamos en un bol dos cucharadas soperas de harina de garbanzo, otra cucharada de levadura nutricional, y 1/4 de vaso de leche de avena. Disolvemos bien, consiguiendo así nuestro sustituto del huevo.
Cuando la manzana esté cocida y empiece a caramelizar, la sacamos del fuego y la mezclamos con nuestra preparación de sustituto del huevo. Ponemos un poco de aceite en la sartén, y añadimos toda nuestra mezcla. Cuajamos a fuego bajo-medio por ambos lados, para que se dore lentamente y se cocine bien por dentro.
El resultado: