No hay ningún misterio para crear comidas vegetarianas deliciosas de forma satisfactoria. Alternativas sabrosas a los ingredientes de origen animal son más fáciles de encontrar que nunca - muchos están tan cerca como tu supermercado local. Ahí van, ¡toma nota!

1. Si estás empezando, es fácil de probar simplemente “veganizando” algunas de sus recetas favoritas mediante la sustitución de la carne, por ejemplo, sustituye la carne picada en burritos o pasta por verduras o carne de soja, sustituye el caldo de carne por uno vegetal en tus sopas o prepara una pizza casera con queso de soja y verduras. Aquí por ejemplo, encontrarás recetas de hamburguesas y pizzas que tanto nos gustan: Hamburguesas y pizzas vegetarianas.

2. Pruebe la creciente gama de productos que imitan la carne, incluyendo hamburguesas vegetales, tartas vegetarianas, hot dogs, salchichas, pollo, jamón, etc, todo de origen vegetal. No sólo son imitaciones deliciosas, sino también son altas en proteína vegetal saludable, bajas en grasas saturadas y contienen cero colesterol.

3. ¿Siempre comiendo con prisas? Platos preparados en los supermercados ayudan a reducir el tiempo de cocción. Por lo general, en las tiendas se puede encontrar una variedad de sopas enlatadas, como la sopa de minestrone, sopa de verduras, sopa de tomate que son veganas. También el arroz ya cocido u otros platos de grano en paquetes, salsas para la pasta, etc. La sección de alimentos congelados suele ofrecer varios tipos de platos veganos, como rollitos de primavera, croquetas, empanadillas de verduras, samosas, etc.

4. Conoce la multitud de alimentos veganos que han sido populares en otros países desde hace años, como hummus, falafel, curry de verduras, sopa miso, ensalada tabulé, etc. Disfruta de platos de frijoles y arroz al estilo mejicano, sushi japonés con aguacate y pepino, curry indio o tailandés, etc.

5. Pide en un restaurante que te preparen una comida sin productos de origen animal. Incluso en los restaurantes donde no se ofrece ningún plato vegano se puede preparar espaguetis vegetarianos con salsa de tomate o setas, o un plato de verduras y arroz.

6. Pide tu pizza sin queso pero con extra de verduras y setas en su lugar.

7. Compra un libro de cocina vegana o pide prestado uno de la biblioteca. Hay libros de cocina para personas que no quieren pasar más de 10 minutos preparando la cena, y hay libros de cocina para chefs gourmet.

8. Busca una fuente fiable de recetas de cocina vegana y empeza a experimentar con nuevos platos.

9. Visita restaurantes de cocina étnica - italiana, china, mexicana, tailandesa, platos japonesa e hindú - donde es muy probable que en el menú se ofrezcan platos veganos.

10. Usa la proteína de soja texturizada en tus platos – no contiene nada de grasa y tiene la consistencia de carne molida. Es un excelente sustituto de la carne en fajitas, platos de pasta, hamburguesas, salchichas, etc.

11. La mayoría de las compañías aéreas ofrecen comida vegana a bordo si se reservas con antelación. Aún así, cuando viajas, puedes llevar contigo algún tipo de snack vegano, como frutos secos, barritas energéticas, leche vegetal en tetrabricks individuales, chocolate negro o galletas veganas.

12. Visita tiendas de alimentos chinos, hindúes, italianos, etc., dónde encontrarás comida vegana típica de esos países - dolma u hojas de parra rellenas, faláfel, hummus, caviar de berenjena, samosas de verduras, diferentes tipos de pasta, algas, cereales, etc.

13. Recuerda que los platos más simples pueden ser más satisfactorios. Así, por ejemplo, un plato de arroz integral con verduras, tofu a la planacha y medio aguacate es un plato ideal para cubrir las necesidades nutritivas.

14. Compra fruta y verdura congeldos - es una manera fácil y económica para comer más sano.

15. Visita el mercado de tu barrio para conseguir fruta y verdura de temporada fresca y sin pesticidas.

16. Para acelerar el proceso del remojo de las legumbres, hiervelas durante 3 minutos y dejalas en remojo 1-4 horas antes de cocinar.

17. Bebe mucha agua y evita jugos y refrescos azucarados.

18. Para ahorrar un poco de tiempo en la prepaación de las comidas, cocina una cantidad extra de lentejas y judías y congélalas para usar más adelante, también puedes utilizr el mismo truco preparando más cantidad de arroz, patatas, batatas, etc. para usarlos l día siguente.