En esta publicación, nos centramos de forma exclusiva en el cuidado de las manos y uñas desde un punto de vista totalmente vegano, alejándonos de prácticas y productos perjudiciales para nuestras extremidades y sugiriendo, además, una alternativa para una manicura totalmente vegana, además de otros datos curiosos.

Las manos se convierten en multitud de casos en nuestra principal arma para combatir el día a día. Y por supuesto, como tal, es la primera barrera con la que enlazamos múltiples contactos físicos. Para muchas personas, el aspecto de las manos es esencial a la hora de entablar o iniciar cualquier tipo de relación social. Póngase como ejemplo una entrevista de trabajo, en la que debes saludar con un apretón de manos: por delante, esa extremidad.

Unas manos bien cuidadas pueden marcar la diferencia. Desde Vegaffinity planteamos algunas ideas para el correcto cuidado de estas, con productos totalmente naturales, libres de agentes tóxicos y que cualquiera de vosotros podrá utilizar en casa para una manicura de lo más saludable. Debemos cuidar nuestras uñas, y no solo por estética, y es que el estado de las uñas es clave en el diagnóstico de enfermedades renales, hepáticas, endocrinas y cutáneas.

¿Por qué surge esta concepción de manicura vegana?

Al igual que en otros muchos productos o artículos relacionados con la salud o la cosmética, la manicura también se ha visto mal influenciada por el concepto low-cost. A pesar de que muchos insisten en la máxima de que lo barato sale caro, también es cierto que hay métodos económicos con los que se pueden paliar determinadas cuestiones. El concepto de manicura vegana, además de evitar los productos que son testados en animales o que no emplea cualquier cosmético que proceda en una mínima medida de animales, es totalmente natural, a buen precio, y puede ejecutarse en casa sin ningún tipo de problema.

En lo referente a la manicura low-cost, este procedimiento de bajo coste ha generado, según distintos dermatólogos españoles, un aumento de las dermatitis de contacto en las consultas médicas de nuestro país. Y no es ninguna broma, ya que estas afecciones pueden generar infecciones, asma y rinoconjuntivitis, ya que no solo perjudica a las propias uñas, sino que algunos de sus componentes son tóxicos para el organismo si se inhalan durante demasiado tiempo.

Se erigen diversos pensamientos en estos casos, por un lado, si es el propio pintauñas en sí o es la acetona con la que luego se eliminan los restos de esta pintura lo que provoca estos daños. En esa cuestión, la ciencia aún debe dictaminar dónde está el origen del problema. Lo que no deja lugar a dudas es que el uso prolongado, continuado y permanente de este tipo de esmaltes de bajo coste desembocan en enfermedades de las uñas y diversas patologías sistémicas.

Como dato revelador y complementario, un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), relacionado con 16 esmaltes de gel semipermanentes adquiridos en portales como Amazon o en webs especializadas en productos cosméticos para profesionales, solo nueve de ellos cumplían la normativa vigente establecida por Sanidad. Los siete que completaron el estudio no estaban etiquetados correctamente o superaban con creces los límites de algunos químicos tan nocivos como la hidroquinona metiléter, responsable de afecciones como las citadas anteriormente, intoxicaciones y alergias respiratorias.

Cómo hacer una manicura vegana de larga duración

A partir de la eliminación de productos para manos que contienen componentes habituales de origen animal en su formulación, los veganos podemos considerar ahora otras opciones para el cuidado de las manos respetando nuestra visión ética. De hecho, en nuestro país la demanda de este servicio va en aumento, ya que los clientes más sensibles al consumo de ingredientes de origen animal han motivado la irrupción en el mercado de esta alternativa a la manicura convencional.

La variedad de los productos es cada vez más amplia. Estos esmaltes ecológicos y artesanales se elaboran, como es obvio, a base de pigmentos vegetales. No contienen ni parabenos, conservantes o sustancias perjudiciales para la salud de nuestras manos, así como el resto de productos o artículos que se deben utilizar para conseguir una manicura de larga duración. Aquí, unos fáciles pasos para dejar las uñas perfectas:

1. Lo primero, desinfectar nuestras manos y por supuesto las uñas con un agua o aceite de árbol de té, un spray de propiedades antibacterianas que ayuda en patologías como infecciones de la piel, erupciones, quemaduras o incluso la caspa. Si aún mantienes restos de esmalte después de tu última manicura, elimínala con una toallita limpiadora (se recomienda untarla con aceite de mandarina y remolacha).
2. Para tratar las cutículas de la uña, se emplea una exfoliante de cactus que facilita la eliminación de la piel sobrante, sin tener así que rasparla o cortarla. Pero esto es esencial, solo hay que eliminar la parte sobrante, ya que protege la base de la uña contra la entrada de bacterias y hongos. También es posible la aplicación de otra crema exfoliante a base de manteca de karité y nuez, de agradable aplicación.
3. Para conseguir un brillo natural a la par que potente, no se necesita aplicar ningún tipo de base antes del esmaltado. En lugar de aplicar escamas de pez, que suele ser el producto habitual en la mayoría de los casos, el brillo se obtiene con mica, una especie de polvo que favorece un esmalte semipermanenteque se seca en unos diez minutos. A su vez, las marcas especializadas en cosmética natural y ecológica ofrecen una variedad decolores en mica cada vez más amplia, para aumentar así el número de posibilidades respecto a tonos cromáticos.
4. Para concluir, se procede a la aplicación de una crema hidratante a base de manzana suiza y manteca de karité que también aporta luminosidad y previene la excesiva pigmentación de las uñas.

La cutícula, esencial en el cuidado de las uñas.

Otros consejos sobre el cuidado de las uñas

• No abuses de la acetona para eliminar el esmalte: La acetona seca las uñas y deja parches opacos y blancos en la superficie. Cuando retires el esmalte con acetona,lávate las manos y pasa unacrema hidratante por las uñas. Es extremadamente importante que no te dejes el mismo esmalte mucho tiempo en las uñas: cuando veas que se comienza a pelar, retíralo.
• No eliminar las cutículas de las uñas: Lo mejor es retirar únicamente el exceso y te asegures que esterilizan las herramientas. Ten cuidado si optas por usar una espátula para empujarla, puedes causar daños en tus uñas si no la manejas con cuidado. Para saber más sobre el cuidado de las cutículas, en este enlace podéis aprender lo necesario sobre el tema.
• Usar guantes para lavar los platos: El detergente genera deshidratación en las uñas, que básicamente se componen de keratina. Si puedes evitarlo mejor que uses el lavavajillas, ya que además ahorrarás mucha más agua que lavando a mano.