Algunos veganos soñamos con encontrar lugares de socialización, esparcimiento e información puramente adaptados a nuestra filosofía. Particularmente, por la zona geográfica en la que nos ubicamos en Vegaffinity (España) desconocemos de la existencia de algún tipo de club social vegano que se dedique a fdifundir este tipo de eventos, aunque seguro que existen; si conoces alguno, puedes dejárnoslo en comentarios ;-) Una idea que nos agrada y asombra especialmente y de la que nos hacemos eco después de practicarse, con muchísimo éxito, en Argentina.

Al otro lado del charco, la capital de este país, Buenos Aires, se ha convertido en cuna y asentamiento del pensamiento vegano. Música, activismo, comida, información, arte… cultura vegana agrupada en el Club Seitán, en el Conventillo Cultural del Abasto. Ofrecemos entonces esta información para nuestros seguidores latinos, especialmente argentinos, sobre un plan singular y magnífico. Y además, intentamos así incentivar la creación en España de lugares así. Si el resto de nuestros seguidores conoce algún club de este tipo, ¡no tiene más que decirlo!

Club Seitán: el paraíso vegano

En el Conventillo Cultural del Abasto, una movida peculiar toma forma desde hace unos tres o cuatro años. Música, activismo y comida se aúnan en el Club Seitán. Buenos Aires está poblado de artistas veganos y vegetarianos, o que están en transición: Paula Perrela (baterista de Richter, Toponauta, Tal Banda), Dizzie Espeche Villasboa (guitarrista de Fito Paez, Emmanuel Horvilleur, Coty) o Dj Nim (ZZK). Ellos, entre muchos otros, buscan espacios nuevos donde poder tocar y divertirse. Es aquí donde surge el Club Seitán, con su organizadora, Amapola, como cabeza visible del proyecto.

Amapola es, con solo 20 años, la mentora y organizadora de Club Seitán desde hace dos años, un festival vegano nocturno que incluye feria de alimentos, espacio de activismo con información, y bar cultural con música y artistas. Se trata de un encuentro bimensual, esto es, realizado un par de veces al mes. De hecho, se trataba de un encuentro exclusivamente mensual hasta hace bien poco, pero la organización quiso probar la repercusión de este evento realizándolo entre semana. Éxito rotundo. Ahora, se realiza la primera reunión el segundo sábado y la segunda en el cuarto jueves de cada mes. Si alguien tiene el placer de viajar hasta Buenos Aires, podrán disfrutar de música, comida y barra vegana en cada evento, una salida nocturna para amigos veganos y no veganos. El calendario de todo este año 2017 ya está programado.

¿Cómo surge la idea de un club vegano?

La fundadora, Amapola, es vegana, activista y activa en las redes sociales. No tiene una idea utópica sobre el veganismo y sus objetivos son simples y concisos: generar espacios informativos y de reunión. Premisa que ella misma confirma: “La gente, con información, cambia de hábitos”.

La asistencia habitual a estos eventos ronda los 300 asistentes. Comienza sobre las 21.00 horas, y dura toda la noche. Y según confirman los datos de la organización, más de la mitad de los asistentes se trata de personas no veganas, que se acercan arrastrados por la curiosidad y para probar la comida vegana. El movimiento, más masivo en la actualidad, aumenta el pluralismo y la tolerancia, aunque siempre existirán detractores en cada vertiente. Este club social vegano es una alternativa a todo ese tipo de conflictos.

La propia Amapola relata en una entrevista que su idea es muy exclusiva, ya que en la noche bonaerense no existía ningún tipo de plan vegano de este estilo. El Club Seitán es una opción en la que todos pueden disfrutar de la comida vegana mientras se divierten con música de fondo. No obstante, la organizadora comenta que sí existen ferias de día en Argentina, las cuales la inspiraron para llevar a cabo su propuesta, y entre las que destaca Locura Vegana, en la Cooperativa de la Casona de Humahuaca, o The Vegan Project, en Avellaneda.

La música, vía de transmisión de este club vegano

El Club Seitán está abierto a propuestas musicales y deseoso de recibir a todos los que quieran participar. La mayoría de los artistas que han pasado por dicho club son veganos o vegetarianos. Buscan un tipo de música que no requiere un público en particular,  y en el que destacan especialmente cantautores de música folk. Generalmente, en cada evento son presentados 2 o 3 artistas por noche, fomentando de ese modo la aparición de músicos que buscan una oportunidad en su particular mundillo. De hecho, hay músicos veganos que hablan de todo un poco.

Entre estos, destaca la presencia de Alesis Monzón, músico activista cuyas canciones hablan sobre veganismo. Su mensaje principal: violencia es comer animales. Alesis Monzón es un habitual del Club Seitán, y sus canciones hablan sobre la explotación animal. Él mismo relata su historia: “Empecé a hacer música a los 18 años, por diversión. Hace tres años empecé a hacer activismo y se mezcló directamente con la música. Veía injusticias y decidí arriesgarme a hablar sobre eso”. Y es que su música ha dado un vuelco espectacular en lo que al mensaje se refiere: “Escribía canciones de historias o de amor, como todos, pero luego se mezclaban algunas con contenido social. Generalmente, la música está basada en lo que se siente a nivel romántico, ésa es la base. Yo iba por ese lado, pero empecé a preguntar a la gente por sus necesidades. Algún tema social empezó a salir en mis canciones. Luego llegó el veganismo. Yo siento que muchos hacen música porque necesitan agradar, yo quiero sumar público a mis presentaciones”.

Alesis cree que la música en parte ha perdido la esencia de transmisión de mensaje y el músico el sentido comunicador. Así es como esta idea cultural nueva, la del veganismo, puede ser transmitida de una manera sencilla a través de la música.

El Club Seitán ofrece todo tipo de posibilidades a estos músicos, ya sea para ofrecerse a actuar por ellos mismos o porque el mismo club lo solicite. Muchos de estos artistas tienen muchas ideas y pensamientos comunes, pero su filosofía es la de atraer público vegano y no vegano, sin exclusividades. Para saber más de ellos, consulta este enlace. Eran pocos cuando empezaron, ahora son un grupo numeroso, y siguen sumando visitantes en cada uno de esos eventos.