El local tiene una decoración simple con paredes pintadas en verde y naranja y algún que otro cartel con los precios y las promociones. Fuera hay una barra para comer de pie. Dentro tenemos 5 mesas y taburetes para comer en la barra. En la barra tienen la carta, de hecho todo el proceso de pedir se hace en la barra. El sistema que tienen es curioso porque dices tu nombre, lo que vas a pedir, lo pagas y según lo van sacando te llaman y lo vas recogiendo. La carta se basa sobre todo en bocadillos de distintos tipos, pizzas, ensaladas, tapas y los postres. Las especialidades de la casa son los roalicos, los rollos, las tortillas rellenas y los kanutos. Tienen también menús de platos combinados y con opción a pedirlos vegetarianos. El gran reclamo del local son los quintos de Estrella, que están a 50 céntimos. En la carta los ofrecen también como complemento de las tapas, por lo que creemos que es un buen sitio para ir de cerveceo y picar algo cuando entre el hambre. “El Roalico” es uno de esos sitios para gente joven que ofrecen comida y bebida a precios muy bajos. Es precisamente por eso por lo que siempre está lleno de estudiantes. Tienes la opción de ir a tomarte unas cervezas a 50 céntimos cada una y si la cosa se alarga poder tapear allí tranquilamente por menos de 10€. El ambiente es desenfadado, la atención correcta y es perfecto para ir con los amigos para empezar la noche o la tarde antes de pasar a la siguiente fase.